Rescritas en con/red/en/sobre danza
Gabriel Machado (BRA)

¿Por qué formalizar el lenguaje abstracto?
¿Cuál es la manera de escribir un lenguaje vivo?
¿Por qué la danza busca justificarse intelectualmente?
¿Cómo seguir de aquí adelante?
¿Cuál es el cuerpo del futuro?

→ Existe un predominio de escritura formal ligado al paradigma científico que es muy distante de la práctica corporal. Condicionados a un lugar de comunicación occidental donde no hay espacio para la sensibilidad del cuerpo.
→ Surge una necesidad del sentido de la identidad de las prácticas escéni- cas/corporales.
→ Hay que escribir como artistas para crear un registro que llegue a otras personas. Nosotros por nosotros.
→ Crear un soporte para la práctica. Otros modos.
→ El registro como la búsqueda de un motivo para pensar el trabajo con autenticidad.
→ Tenemos que hablar sobre lo que nos pasa.

En la Integración entre el cuerpo y el pensamiento se hace vigente pensar la performance escrita como modo de entender o como contorno de producción literaria. No sólo como el “contexto de una obra”, más como algo que mueve a esa obra a lo largo del tiempo en sus diferentes niveles de integración o desintegración de cuerpo-pensamiento de los artistas en sus ideas de la escena; literarias, plásticas, visuales, musicales, corporales o todas juntas.

En el campo de escritos literarios podemos percibir la invasión de aspectos teatrales u orales y un cúmulo de situaciones cotidianas, hecho que requiere escucha del proyecto existencial del autor. Proyecto existencial como las posibles redes de presencia. No el texto. Un sujeto portador de varios sentidos que dramatúrgicamente está reorganizando una obra.

Los escritos requieren un acto de intensificación y extensión de una experiencia ficcionalizada, pero no falseada, porque toda ficción es una verdad personificada, no un acto de literatura. Así como podemos afirmar que todo dato biográfico presente en el texto es una ficcionalización de una realidad disuelta en las redes de la subjetividad.

Este juego de los cuerpos paganos enmarañados anarquistas enamorados deseosos cayendo y empujando desde la mirada, los sueños compartidos y las alucinaciones democráticas del ser uno mismo. Soltar el miedo del no saber. El juicio en los tobillos quebrando los tejidos capa por capa hacia adentro y hacia afuera, entre medio de la piel. Pliegues, ondulaciones, inestabilidades, imposibilidades, límites.

La imposibilidad de un lenguaje de ser otro lenguaje es el sin sentido de ser ese otro que nos dijeron alguna vez cuando niños. ¿Cuál es la necesidad de pegarse en el estado de la nada por el intento agotador de ser ese ejemplo de perfección impuesta que NO queremos ser? Nos movemos para manifestar ese descontento, esta es nuestra revolución.

El verdadero trabajo del movedor que manifiesta el poder de la escena como la intensión de compartir un sentir/pensar/actuar para el encuentro con uno y con otras debiese de ser además la posible manera de escritura de su ficción encarnada para poder nombrar su única e irrepetible traducción de los deseos y alucinaciones.

Carta/manifiesto: Urgencias para la danza

La revolución del cuerpo como totalidad que transforma y deviene constantemente es manifestar el descontento de no querer pertenecer más a un sistema que banaliza, privatiza, objetualiza, masifica, inhibe y domestica al cuerpo. Siendo este el principal contenedor del manifiesto del movimiento necesita (mos) potenciar y actualizar nuestras fuerzas, nuestros modos que nos hacen ser y estar en este momento y lugar. Me urge acelerar el trabajo de investigación y registro del poder visibilizar mi propia práctica escénica/corporal con la intención de ser compartida. Con esto, liberarse al fin de esa idea de cuerpo estereotipado de occidente, de la noción de representación, de decidir sobre lo bello y lo que no, el fin al conductismo como traspaso de conocimiento, el fin a la marioneta intérprete, el fin de las relaciones verticales en las prácticas artísticas y cotidianas, el fin del cuerpo herido, maltratado, abusado y roto.

Quisiera darle la bienvenida a todos los modos que sean posibles desde el estudio y la honestidad de sus prácticas, quisiera ser parte de esos encuentros que serán la danza, los posibles espacios de integración de los cuerpos múltiples, la vinculación misma de ese pliegue como algo que está viajando, absorbiendo todo y todas para regalarnos a nosotras mismas autonomía, amor y vínculo. La piel querrá tocar y ser tocada, la escena será la vida misma de migración y movimiento constante, de conexiones múltiples que no nos pertenecerán a ninguna pero serán nuestras, para poder soltar… soltar hasta el olvido, hasta la muerte.

“El hombre cabeza de papel” / Instalación performática

A partir de la investigación construimos la apertura del proceso como una instalación en la que exponíamos nuestras preguntas sobre la relación entre el cuerpo y el pensamiento, entre la escritura y la danza.

Llenamos las paredes de papel kraft con preguntas y palabras que surgieron durante el encuentro y dejamos muchas hojas en blanco en el piso para que los que entraban a la sala pudiesen dejar sus propias impresiones. Proyectamos un video que grabamos previamente con nuestras cabezas de papel que se repetía como un loop. Habíamos tres movedores en diferentes secuencias y planos del espacio. Yo estaba sobre la pared frente al vidrio con un plumón escribiendo la frase “Las palabras nos ayudan a sentir lo bailado no siendo este el fin sino el comienzo una muerte enamorada”. El método fue composición en tiempo real en base a nombrar/escribir toda palabra que se me venía a la mente mientras me movía.